Hoy se ha publicado el ultimo estudio de competitividad turística a nivel nacional y, Oh sorpresa!, Aramón (perdón, Aragón) no sale especialmente bien parado. Ocupamos un mas que discreto penúltimo lugar digno de Eurovisión, solo por delante de Extremadura. En el estudio se nos incluye en el furgón de cola con otras comunidades como Cantabria, Asturias y Extremadura, que según el estudio están condicionadas por factores como un menor conocimiento de sus atributos turísticos, su accesibilidad respecto a los grandes mercados, su más reducido tejido empresarial y una aún incipiente apuesta por el turismo.
Vayamos por partes: respecto a las dos primeras cuestiones, he de decir que la presencia de nuestra región en las dos últimas ediciones de FITUR y en otros eventos turísticos profesionales a los que he tenido la fortuna de acudir a trabajar, ha sido de pandereta. Me daba vergüenza ajena no solo la obsoleta oferta del Gobierno de Aragón - centrada en los eternos Esquí, Casa Rural y Turismo Religioso - sino que ademas la imagen del stand era ridícula en comparación con otros que, como por ejemplo Castilla y León, habían conseguido impactar a los que asistíamos con una apuesta por elementos reciclados y austeridad con diseño.
En cuanto al tejido empresarial, la cosa está malica. Es muy dificil meter cabeza en un mercado saturado de alojamientos deficitarios, (Aragón es una de las comunidades con un índice menor de ocupación y pernoctaciones). Ademas de esto las políticas de ayudas de la UE (Lider, Cider, Grus, etc) sólo han conseguido que el tejido se llene de empresas cuya actividad se reduce al dulce verano, convirtiendo a la Tierra Noble (como me gusta ese concepto, da tanto juego...) en una versión de secano del Levante.
En relación a la apuesta por el turismo por parte de las autoridades (in) competentes, bueno, queda bastante claro tras ejemplos como Aramón y su "Fiebre del oro blanco", Gran Scala, la Expo y otros tantos, que nuestros dirigentes, lo que es de turismo, pilotan poco. Si lo hicieran sabrían que la estacionalidad del turismo de nieve lo convierten en una apuesta muy poco segura como pilar de una campaña. De Gran Scala... que decir? De verdad quieren llenar nuestra comunidad con lo peorcico de cada casa? Porque este tipo de turismo convierte a sus zonas de influencia en una suerte de áreas CSI (disculpad el símil televisivo, pero creo que lo explica muy bien) donde campan a sus anchas mafiosos, jugadores y toda clase de gente indeseable. Y respecto a la Expo y demás eventos de ese tipo creo que con un "Pan para hoy, hambre para mañana" sobra.
Sinceramente, es lamentable ver como seguimos anclados en los mismos clichés setenteros que supusieron aquel Boom del turismo - que en realidad lo fue de la construcción y que acarreó las nefastas consecuencias que hoy todos sufrimos - que no permiten que avancemos hacia modelos mas sostenibles económica y ecológicamente hablando. Está claro que ya no podemos vivir del sablazo al guiri, ni mucho menos de los beatos que vienen a rezar a Torreciudad. El modelo turístico ha de cambiarse radicalmente, sino estaremos eternamente avocados a ocupar puestos tan poco honorables.
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