martes, 29 de noviembre de 2011

EL CONTRATO DE APENDIZAJE, LA NUEVA ESCLAVITUD DEL SIGLO XXI




Mi amigo Fran que tiene 24 años, acaba de terminar su carrera de empresariales. Muy ufano y con un título universitario en el bolsillo ha pasado estos últimos meses buscando curro. Él se las prometía muy felices pensando que su nuevo y reluciente título le iba a abrir las puertas del mercado laboral. Craso error. Poco a poco ha ido perdiendo las ilusiones y cada día se le ve más tristón y apagado. Pese a haber inundado Zaragoza y ciudades próximas con cientos por no decir miles de currículum, no encuentra nadie que le llame siquiera para hacer una prueba.

Para no ser una carga en casa, vive aún con sus padres, acepta cualquier cosa que se le ofrece, aunque como pasa casi siempre nada tenga que ver con lo que durante años ha sido el objetivo de su carrera. Así algunos meses consigue sacar la pasta justa para pagarse sus gastos y si acaso echar una mano en casa donde otro de sus hermanos ya emancipado, ha vuelto al quedarse también en paro.

Esta situación por la que atraviesa Fran es más común de lo que a muchos nos gustaría. Rara es la familia en la que alguno de sus miembros no está en paro. Para muchos incluso éste ya ha terminado y se encuentran sin recursos, con el agua al cuello y dependiendo de familiares y amigos para cosas tan imprescindibles como comer, pagar el alquiler o la hipoteca de su casa.

Hoy he vuelto a encontrarme con Fran, lo he visto más ilusionado, me cuenta que le han hablado de ese nuevo contrato de aprendizaje que ha aprobado en uno de sus últimas decisiones, el gobierno socialista. El pasado día 19 de noviembre, en vísperas de las elecciones, entró en vigor el RD 1543/2011 que restaura la figura antediluviana del "aprendiz".

-No es un contrato, le aclaro. ¿Como que no es un contrato?, me replica. No, no se trata de un contrato sino de la realización de unas prácticas en una empresa.  A cambio de esas "prácticas laborales" que en ningún caso están recogidas en un contrato, durante nueve meses, el joven menor de 25 años, recibirá la fastuosas cantidad de 426 €/mes.

-Menos es nada me dice. Hombre, menos ya no puede ser, le digo, porque además de esa miseria de salario que te van a pagar, estos "acuerdos con personas jóvenes para realizar prácticas de carácter no laboral", que manda narices que subterfugios se inventan para no llamar a las cosas por su nombre, no tendrás derechos laborales. Ni vacaciones, ni permisos, ni paro, ni indemnizaciones, ni excedencias, si una jornada máxima de trabajo según le convenga al patrono y estarás a disposición de las modificaciones horarias o de trabajo que a tu jefe se le antojen.

No puede ser tan malo, me dice torciendo el gesto. Si que lo es, le cuento. No tienes sino leerte el RD 1543/2011 para enterarte del nuevo modelo de esclavitud que nos ha dejado el gobierno socialista.

-Será solo para quienes no tengan titulaciones universitarias, aventura. Pues siento decirte que no, le digo bastante apenada al ver su cada vez más seria cara. Este nuevo contrato de formación que han parido ZP y sus muchachos puede aplicarse a todo aquel menor de 25 años que esté apuntado al paro. Tengas o no titulación universitaria y siempre que seas menor de 25 te pueden hacer sucesivos contratos, perdón "acuerdos" sin que se consideren relación laboral o supongan experiencia profesional. Un chollo para el patrón que se ahorra los pagos a Hacienda. Simplemente con que tu "tutor" que no jefe,  pague a la Seguridad Social la minucia de 34,51 €/mes ya tiene un esclavo a quien explotar, desprovisto de cualquier derecho laboral o sindical. Porque a ver quien es el guapo que se atreve a afiliarse a un sindicato y o exigir derechos laborales cuando ni siquiera tienes derecho a lo más elemental que el paro. Pero eso si, a ti todos los meses de tu miserable salario, te descontaran 6,05 €/mes en concepto de cotización.

-¿ Y al finalizar el "acuerdo", me van ha hacer contrato laboral?. Pues depende, solo si lo pone en el convenio. Pero casualidad de las casualidades hasta ahora no figuraba en ninguno, por lo que va a ser muy difícil que al terminar ese "acuerdo", como no trabajas sino que estas haciendo unas prácticas que a tu jefe le resultan beneficiosas y muy baratas, pues que ya se lo pensara...


-Pero, ¿algo me darán al finalizar estas prácticas?. Si hombre, te darán una palmadita en la espalda, un certificado de las horas que has regalado a la empresa y un cita con el INEM para que vuelvas a inscribirte en el paro.

-Pues oye que este contrato parece una esclavitud encubierta. Si que lo es Fran. Y lo peor es que muchos jóvenes, desesperados por no encontrar curro se van a agarrar a él sin darse cuenta que aquí los únicos beneficiados van a ser los empresarios que tendrán mano de obra barata y prescindible y el Estado que se va a ahorrar un montón de euros ya que el dinero que debería de aportar para IRPF y S.S. en realidad lo paga el propio aprendiz.

-¿Y dices que lo ha aprobado el gobierno socialista en vísperas de las elecciones y sin que nos enteráramos?. Si Fran, pero es difícil que tuviéramos noticias de ésto, pues como pasó con la última reforma constitucional, todo se hizo sin publicidad, para que nadie pudiera protestar.

-¿Y los sindicatos, no protestaron por este nuevo ataque a los derechos de los jóvenes trabajadores?. Pues por lo que se ve, poco o nada, ya que a la postre ni siquiera se reflejó en prensa ni sirvió para nada.

-Siento haberte amargado el día, le digo, mientras le veo alejarse cabizbajo y triste. Retomo mi camino y me voy cruzando con un montón de jóvenes, los mejores preparados de la historia de este país que como Fran, no encuentran un trabajo acorde a su preparación, malviven en curros pésimamente pagados. Además si son menores de 25 años, puede que caigan presos de esas mal llamadas prácticas laborales que los convertirán en los esclavos del siglo XXI.


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